miércoles, 27 de octubre de 2010

Pájaro loco

La primera vez que le presté atención verdadera fue cuando asumió el mando. Antes que el estadista ví la marca personal del hombre: el tipo no sabía qué hacer con el bastón, le sobraba, lo apretó con las dos manos, lo usó para revolearlo un poco, lo sacó del eje de bastón y pareció por segundos un malabarista de esos que vemos en las películas, que malabarean adelante del grupo con estridencia de charreteras. Creo que antes me había hecho acordar al Pájaro Loco, un dibujito animado de cuando era chica, aunque la única relación evidente estaba en los ojos desorbitados y la nariz en punta de águila. Muchos en el largo y emocional día de hoy lo evocaron como un hombre con buen humor constante, y recordé (otra vez) que ese tipo desgarbado y con el saco siempre mal puesto, innegablemente parecido a Tristán por otra parte, parecía estar a punto de contar un chiste verde en el medio de cada frase.
Todas estas banalidades recordé hoy, todas juntas, después del segundo en que enmudecí al ver la noticia. Me retiré de la tele luego del silencio. Estaba en la casa de mi madre aprovechando que tenía que estar allí para esperar al censista y levantando de la cama a mi abuela Coca, que por estos días anda leeeeenta después de sus dos caídas. Después que tomó su leche la ubiqué cerca de la tele, y recaímos en la mudez por partida doble. Mi abuela sabe que la muerte le amaga de cerca últimamente, y a pesar de que siempre fue antiperonista, vió toda la mañana en silencio las noticias y no quiso cambiar de canal.
Yo no soy peronista tampoco, pero sobre todo no soy antiperonista. Es una declaración estúpida de hacer, que nada dice. Es la mejor declaración que puedo hacer por el momento. Soy antineoliberalista. Estoy a favor del matrimonio igualitario, de la distribución equitativa de la riqueza, de la memoria toda y de los juicios a los represores en particular, del desmontaje del sistema opresor de la circulación de las noticias de los medios hegemónicos, del desmontaje del cuadro de ése represor, de todas las medidas que promuevan el empoderamiento social, educacional y simbólico de los olvidados, de las leyes promovidas o vetadas con coherencia respecto del proceso económico y social que tenemos, de un proyecto que nos integre por fin como parte de Latinoamérica, de aquel NO al ALCA y el sí a la UNASUR, del sinceramiento argento del fútbol para todos, de la ciencia y la tecnología y la industria empezando a jerarquizarse.
Seguro que me falta poner más en esta enumeración (más de lo que hay y más de lo que no hay todavía) pero hoy enmudecí temprano y me fuí apalabrando después porque entendí que sin Pájaro Loco no hubiera podido estar a favor de esta enumeración, no la hubiera podido poner en palabras, es decir: no hubiera existido.
Termino el día con el encuentro, con el lazo que se recupera de modo posible y real: veo la gente en la plaza y en el programa de televisión, leo un mail de una amiga y nos abrazamos en la distancia, charlo con mi vieja sobre los lazos que no queremos perder, y ya ni recuerdo tengo del miedo al miedo, de las palabras necias y de la desazón por cómo seguimos. Salud, Pájaro Loco.
La Pocha

3 comentarios:

  1. y SÍ soy antigorila, la concha de tu puta madre capitalista y neoliberal, lucrando acciones en los mercados del mundo después de la muerte de Kirchner!

    ResponderEliminar
  2. Muy linda la nota Pocha! Y el comentario después también! Me da mucho miedo la suba de acciones de los buitres espectante a venir a comer y levantar de nuevo lo que Néstor supo sacar...!

    ResponderEliminar
  3. Bien puesta la bocha, Pocha! Comparto el sentimiento casi completo... Es tal como decís: hay que reconocer que por algo estamos hace casi 10 años sin crisis económica hiperinflacionaria, lo que nos ha permitido respirar, ocuparnos de tantos temas pendientes (pobreza, distribución de riqueza, justicia, medios, matrimonio igualitario, etc.). Es muy probable que si seguíamos con Duhalde, de esto jamás se hubiera hablado; bah, lo hubiéramos conversado, como siempre, por atrás, a pesar de las trabas de arriba. El Kirchnerismo supo abrir y proponer la discusión sobre reivindicaciones sociales. Un abrazo,
    Pablo

    ResponderEliminar